5 de junio. DIA MUNDIAL DEL "CUARTO" AMBIENTE.

"El 25% del aumento de las temperaturas desde la era industrial se ha producido prácticamente en el último año", asegura el meteorólogo Eric Holthaus. "Da miedo lo que está ocurriendo. Estamos llegando a un punto en que no sabemos qué va ocurrir. Sabíamos que El Niño iba a tener un impacto este año, pero no esperábamos un salto así", esto proviene de uno de los expertos científicos de la NASA, asimismo en el artículo que enlazo hay otras afirmaciones de diversas agencias intenacionales y espaciales (ASE). Esta asombrosa, por terrorifica, afirmación corrobora lo que ya se estimaba, solo que de dar avisos como el manifiesto de la "última llamada" del 2015, vemos que se va cumpliendo las predicciones.
Aprovecho y os cuelgo el artículo que he escrito este año para el dia internacional del M.A. El título viene a ser un juego de palabras donde cada vez parece tener menos peso la protección ambiental y pasa de ser medio importante a ser un cuarto, a su vez recluido en el mismo.


            "Ha llovido mucho y ha subido bastante la temperatura desde aquella cumbre en Estocolmo de 1972, hace exactamente 44 años. Y es que hoy se conmemora el día internacional del Medio ambiente. Y en la agenda global esta el tratar el ya reconocido cambio climático generado por la acción humana, que supone reestructurar los procesos productivos, fórmulas de transporte y obtenciones energéticas tal y como las conocemos para reducir los GEI o gases de efecto invernadero.
             En los últimos 25 años han tenido lugar 3 grandes cumbres (johannesburgo y 2 en Rio de Janeiro), y múltiples convenciones de la tierra y del clima (modificación climática) con muy buenas intenciones y muy pocas medidas reales -salvo Kioto-: Lima, Doha, Varsovia, ect...hasta llegar a la denominada COP21 de París. La tónica general de todas ha sido el venderlas como acuerdos "Históricos" al cerrarlas con un amplio consenso, firmando poco más de una docena de páginas o acuerdo de mínimos para que estén China y EE.UU. Sobre las medidas y fondo de estos acuerdos (no vinculantes) se lee mucho conceptos como "alentar", "invertir",  "investigar","recomendar" "proponer", "instar", "preocupar"... y ya en el último escenario de la capital gala el único dato concreto que leemos fue el de no llegar al incremento de los 2 grados, esforzándose en no rebasar los 1,5,  al finalizar este siglo XXI. Con un plan de trabajo, una mínima financiación y una serie de comisiones institucionales que velaran y revisarán por esos principios a partir del 2020.
            Como contraste durante estos años tenemos la hemeroteca (y la realidad) plagada de dantescas noticias y estadísticas sobre alteraciones de temperatura, deshielos, destrucción de hábitats, especies y entornos naturales (como la que comento antes de este artículo). Además acecha actualmente la aprobación de tratados como la TTIP, tratado de libre comercio entre EE.UU y U.E., que entre otras barbaridades, establece privilegios de las multinacionales respecto a la legislación de los estados miembros y antepone principios productivos y mercantilistas por encima de los proteccionistas sociales y ecológicos. O sea provocará medidas diametralmente opuestas a lo que pretende el COP21.
            Y es que al final todo esta vinculado; la justicia, la equidad y el equilibrio natural y climático  van de la mano y, por contra, estamos en un desarrollismo económico que va en dirección contraria. Todo ello a pesar de que todas las alarmas están encendidas y que es evidente científicamente que este modelo esta caduco y genera grandes desigualdades.
            En nuestro país seguimos con la "lógica" perversa de los megaproyectos  que más que cubrir servicios sociales y bondades ecológicas acaba suponiendo todo lo contrario, un latrocinio  al amparo de ciertas administraciones y políticos, pagando la ciudadanía y las cajas de ahorros. Ejemplos ilustrativos son el blindaje de la ley energética a la oligarquia empresarial, estableciendo peajes a las alternativas o "el impuesto al sol", haciendo inviable el autoabastecimiento. Otro gran ejemplo es el PITVI (plan de infraestructura de Transporte y vivienda), que es continuista a su predecesor PEIT (2005) y que sigue una irracional apuesta por las grandes infraestructuras; más AVE y más autovías. Con números vemos que en 2014 más del 90% de las inversiones son para la Alta Velocidad (3.194 millones) con 29,6 millones de pasajeros frente a 121 millones a Cercanías, con 405 millones de viajeros; pero no acaba ahí la cuestión,  se plantea 7.289 km más de líneas AVE por todo el Estado. Al final ni se cumple la rentabilidad social, ni los beneficios ecológicos ni siquiera la económica de cara a las arcas públicas. Tomen apunte de cara a la cita común del 26 de Junio.
            Pero no nos pongamos apocalípticos, pues ante el cambio de color político del último año en algunas comunidades y municipios se está demostrando que hay fórmulas de gestión sostenibles y que serán referente en los modelos que establecen ese cambio inevitable de tendencias en hábitos y convivencia. En campos como los RSU (residuos Urbanos), recobran ideas como la recuperación de envases cristal que supone nuevos recursos o implantar el contenedor orgánico facilitando la recuperación general; además cada vez más municipios aplican fórmulas laborales enfocadas a la EBC (Economía del Bien Común), medidas para potenciar la agricultura ecológica que proteja la biodiversidad o apuestas por la movilidad sostenible a nivel urbano con participación ciudadana, impulsando las zonas peatonales, transporte público y viales ciclistas. Por otro lado se está recuperando poco a poco la gestión pública de servicios de necesidad básica hasta ahora privatizados.
            No obstante queda mucho camino que rehacer, o en su defecto recuperar, y es que si hace unos años sentía que el medio ambiente paso de identificarse solo con figuras naturales (parques, costas, fauna y flora)  para ser un acólito de las medidas económicas y sociales, a día de hoy siento que lo que debería estar como principio básico y trasversal de las políticas económicas, fiscales o energéticas, está recluido en un "cuarto" mal orientado y poco luminoso.
Luis Falcó Maestre
Verds-Equo Alacant / Compromis Alacant (#alavalenciana).